AYUDA AL APARCAMIENTO
Principio de funcionamiento
Unos detectores de ultrasonidos, integrados en el parachoques trasero del vehículo, «miden» la distancia entre el vehículo y un obstáculo.
El sistema de ayuda al aparcamiento se activa cuando se mete la marcha atrás.
Esta medida se traduce en unas señales acústicas cuya frecuencia aumenta con la aproximación al obstáculo, hasta convertirse en un sonido continuo cuando el obstáculo se encuentra a unos 20 o 30 centímetros del vehículo.
Particularidades
Asegúrese de que los captadores ultrasónicos indicados por las flechas no estén obstaculizados (por suciedad, barro, nieve, colocación/fijación de la placa de matrícula), golpeados, modificados (incluida la pintura, etc.) u ocultos por algún accesorio instalado en la parte delantera o trasera del vehículo.
Esta función es una ayuda complementaria a la conducción.
No puede por tanto, en ningún caso, sustituir la vigilancia ni la responsabilidad del conductor cuando realice maniobras.
El conductor debe estar siempre listo para los acontecimientos imprevistos que pueden darse durante la conducción: vigile siempre, por tanto, que no haya obstáculos móviles pequeños (tales como un niño, un animal, un cochecito de niños, una bicicleta, una piedra, un poste, etc.) dentro de la zona de ángulo muerto durante la maniobra.

Funcionamiento
Al cambiar a marcha atrás, se oye una señal acústica. Se detecta la mayoría de los objetos que se encuentren a, aproximadamente, menos de 1,20 metros detrás del vehículo.

Activación/desactivación
Presione el interruptor 1 para desacti- var el sistema.
El testigo del interruptor se enciende para indicar que el sistema está desactivado.
Un nueva presión reactivará el sistema y el testigo se apagará.
Anomalías de funcionamiento
Si el sistema detecta una anomalía de funcionamiento, se emite una señal acústica de tres segundos cada vez que se introduce la marcha atrás. Consulte a un Representante de la marca.
En caso de choque en el bastidor del vehículo al realizar una maniobra (ejemplo: contacto con un bolardo, un bordillo sobreelevado u otro mobiliario urbano), se puede dañar el vehículo (ejemplo: deformación de un eje), el circuito eléctrico o la batería de tracción.
No toque los elementos del circuito o las eventuales fugas o líquidos.
Para evitar los riesgos de accidente, haga que un Representante de la marca controle su vehículo.
Riesgo de heridas graves o de choque eléctrico que pueden provocar la muerte.